¿Quién se atrevería de negar que el móvil será un medio de pago
predominante? Sin embargo a estas alturas su penetración sigue siendo realmente
baja, y es que la pugna de los diferentes players por hacerse con el negocio
está dificultando la adopción por parte del consumidor que se enfrenta a una
oferta compleja que no cubre satisfactoriamente sus necesidades.
Actualmente hay tres tipos de empresas que ofrecen soluciones para pago con
móvil: bancos, telefónicas y tecnológicas. La oferta de cada tipo es bastante
similar entre sí, diferenciándose en algún aspecto importante del resto:
·
Bancos:
amplitud de uso y restricción en número de tarjeta. Los principales bancos en España
tienen una solución para pago con móvil (BBVA Wallet, Santander Wallet,
Kaixabank Pay y Bankia Wallet). Todas funcionan con una aplicación propia. Los
requisitos son ser titular de una tarjeta de la entidad, disponer de un
terminal NFC (salvo los iPhone por motivos que explicaré más adelante) y que los
terminales de la tienda sean contactless.
·
Telefónicas:
amplitud de uso y tarjetas. Tanto Vodafone como Movistar y Orange (las telecos
que se reparten el 80% del mercado español) han desarrollado sus propios
billeteros virtuales (wallets) que tienen como ventaja que pueden albergar
varias tarjetas de diferentes entidades, aunque en algunos casos quedan
limitados a algún tipo de tarjeta, como Orange, que solo admite VISA.
Tecnológicamente tienen las mismas exigencias que en el caso de los billeteros
de los bancos, y la promesa básica es que con ellos se puede pagar en cualquier
establecimiento dotado del TPV adecuado.
·
Tecnológicas:
exclusivas y sexis. A la espera de Android Pay que no acaba de llegar a España,
la irrupción de Samsumg Pay y Apple Pay está animando el panorama. Las dos han
llegado prácticamente al unísono y su oferta se parece bastante entre sí, con
una propuesta de valor sustentada en la seguridad (sistema de identificación
por huella digital y seguridad de datos mediante) y en una experiencia de uso
muy superior por rapidez y facilidad. La contra viene por su exclusividad,
tanto desde el punto de vista tecnológico (funciona con móviles de dos marcas y
además con modelos de última generación) como para los casos de uso, ya que no
todas las entidades financieras han adoptado estos sistemas (de hecho de
momento son pocas) y no se puede usar en todas las tiendas, aunque dispongan de
terminales contactless. El caso de Apple como siempre es especial: de saque elimina
cualquier otro medio de pago que no sea el suyo.
¿Y qué ocurre con el comprador? Los factores que harán que adopte esta nueva
forma de pago son:
1.
Conveniencia:
en un solo sitio todas las tarjetas, y pagar con el móvil en cualquier sitio
2.
Seguridad:
evitar fraude y proteger los datos personales
3.
Experiencia
de usuario: tanto en los referido a facilidad de uso como a la emoción generada
Si lo vemos desde la perspectiva de la oferta, el panorama es más o menos
el siguiente
La banca flaquea porque solo admiten sus tarjetas -para los que solo tengan
o usen tarjetas de un banco esto no será un problema- y aportan el plus de la
amplitud de uso ya que prácticamente se podrá usar en cualquier
establecimiento. La seguridad se supone que no será un problema al estar basada
en los actuales pagos con tarjeta y ya existe una relación entre entidad y
comprador, mientras que la experiencia de uso es suficiente.
Las telefónicas aportan mucha conveniencia (son los únicos que ofertan
amplitud de tarjetas y de establecimientos), teniendo en la seguridad su punto
flaco ya que significa un nuevo intermediario con acceso a los datos bancarios
y personales. La experiencia de uso es aceptable. De los tres tipos de players,
son los que parecen llevarlo peor.
Las tecnológicas se presentan como las más seguras, conocedoras de las
reticencias que podrían tener los compradores por permitir el acceso a sus
datos a un nuevo intermediario, le han dado la vuelta y basan su propuesta
precisamente en la promesa de que eso nunca ocurrirá. Además juegan con la
ventaja tecnológica de la identificación por huella digital. La experiencia de
uso es claramente la mejor de todas por facilidad y emoción, sobre todo para
los early adopters. El precio a pagar por la exclusividad es la limitación de
uso, en estos momentos excesiva.
Ante este panorama no es de extrañar que el pago con móvil en España no
llegue más allá del 2,4% (fuente PwC). Los compradores (caso aparte los
usuarios de iPhone) se ven en la tesitura de adoptar varios sistemas para
acceder a todas las ventajas que el pago por móvil le puede ofrecer; demasiado
complicado. Afortunadamente ya se produjo hace años la adopción de la
tecnología NFC como estándar en el mercado, lo que permitió un acelerón
importante al asunto, pero llegados hasta aquí hace falta otro salto
cualitativo para que el pago con móvil acabe explotando definitivamente.
Y a todo esto, ¿qué hay de los retailers? ¿qué opciones tienen? Antes de
nada parece inevitable que deben preparase (una vez sustituidos los TPVs por
modelos contactless) para admitir el mayor número posible de modos de pago con
móvil. Sería mejor que la oferta estuviese menos fragmentada, pero es lo que
hay y los clientes que quieren pagar con el móvil serán cada vez más. Aparte de
esto, pueden optar por esperar a ver cómo se arregla la pugna en la otra parte
de la cadena de valor, o bien desarrollar su propia estrategia aliándose con
una de las dos partes (de momento las alianzas declaradas han sido con las
tecnológicas) o bien desarrollar sus propios sistemas para eliminar
intermediarios entre ellos y sus clientes, como intentan hacer los grandes en
EE.UU. para que el pago se realice contra cuentas bancarias y no contra tarjetas
de pago. Creo que la primera opción será la habitual entre los medianos y
pequeños, y que podemos esperar algún movimiento de alianzas en el caso de los
grandes, descartando la tercera opción en España.
ACTUALIZACIÓN 21_07_'17; ECI se alía con Samsung Pay
Los grandes retailers siguen poco a poco estableciendo alianzas con operadores. Tras la de Carrefour con Apple que sirvió de pista de aterrizaje de Apple Pay en España, El Corte Inglés concreta el acuerdo con Samsung Pay vinculado a su tarjeta de pago. Seguro que pronto habrá más noticias de este tipo. Os dejo el enlace a la noticia:
Los 11 millones de clientes de tarjeta del Corte Inglés ya pueden pagar con Samsung Pay
ACTUALIZACIÓN 21_07_'17; ECI se alía con Samsung Pay
Los grandes retailers siguen poco a poco estableciendo alianzas con operadores. Tras la de Carrefour con Apple que sirvió de pista de aterrizaje de Apple Pay en España, El Corte Inglés concreta el acuerdo con Samsung Pay vinculado a su tarjeta de pago. Seguro que pronto habrá más noticias de este tipo. Os dejo el enlace a la noticia:
Los 11 millones de clientes de tarjeta del Corte Inglés ya pueden pagar con Samsung Pay
No hay comentarios:
Publicar un comentario